El infierno son los otros

A causa del gran impacto que significó “Deep Throat" (Garganta Profunda, 1972), su debut, Gerard Damiano fue primero solicitado por la Justicia y después asaltado por la Mafia. Pero mientras los delincuentes tomaban el control de la rentable “Garganta”, su director se reponía espléndidamente en su siguiente película, “Devil in Miss Jones”. En ella, Damiano demostraba tener inusuales ambiciones de estilo sin que ello significara reducir la cuota de carne que el público esperaba encontrar. De hecho, hasta fue aumentada. Sin embargo, la “señorita Jones” no necesitaría del escándalo que gozó la juguetona “Garganta” para volverse un clásico. Sofisticada e inquietante, “Devil in Miss Jones” encandiló a los críticos con la promesa de una pornografía intelectual. “La señorita Jones”, el redentor de un género que nunca creyó en vírgenes.

Acto seguido Justine inicia su aprendizaje a manos de su “tutor” (Harry Reems) que como primera lección le introduce un dildo en el ano. A pesar del rudo bautizo, el interés de la señora Jones no hace más que crecer. Descubre maravillada las experiencias que ofrece el pene de su tutor. Lo manipula, hace preguntas, le rinde veneración inmediata. La felación es un descubrimiento inevitable, y Justine lo practica como si fuera su inventora en una escena que inclusive hoy es sorprendente. Con dolor y placer Justine pierde su antigua virginidad. En su nueva vida el disfrute carnal será lo único importante. A continuación vemos a la señora Jones pasar lista a las estaciones obligatorias del catálogo porno: un escarceo lésbico, masturbación con frutas, felación a dos bocas, penetración a dos penes y hasta jugueteos con una serpiente. Conmovedor el momento en que Justine se masturba en la bañera, donde antes se había suicidado. El acto, acompañado por una banda sonora épica, tomada de un western, nos muestra un apego desesperado por la vida.

A pesar de estar totalmente adscrita al porno y a su propósito de estimular, “Devil in Miss Jones” es una película de ruptura en el género. Para comenzar, abre con una chocante escena, el suicidio en la bañera, elemento totalmente atípico en un género tan complaciente y predecible. Apostando por hacer un film consistente y no utilizar un pretexto argumental para hilvanar números sexuales, Damiano se toma su tiempo tanto en la contemplación de la muerte como en las celebraciones del placer. El desenlace nos deja una reflexión irónica sobre lo vano que resulta tanto ser casto o lujurioso. Aunque parezca mentira, “Devil in Miss Jones” fue escrita bajo el influjo existencialista de Jean Paul Sartre, concretamente de la pieza teatral “A puerta cerrada” (1967). En esta obra, tres personajes condenados al Infierno descubren que su castigo será permanecer en la misma habitación, soportándose mutuamente por siempre. De aquí la famosa frase, “el infierno son los otros”, sus miradas y nuestra necesidad de aceptación.

Simplemente, Georgina Spelvin puso su conocimiento actoral al servicio de las exigencias del género. Es justamente esta capacidad lo que hace “Devil in Miss Jones” una película tan potente. Georgina hace verosímil el cambio tan abrupto de virgen a ninfómana. En el trayecto, dejó para sus seguidoras el paradigma de la puta pornográfica: ciega adoración al falo y sus varoniles fluidos, predilección por el coito y magnífica actitud para intentar otras formas de penetración. Pero todo esto, que miles han repetido hasta el cansancio, tuvo en Spelvin la interpretación más convincente y apasionada. ¿Que mejor para excitar al público que hacerles creer que toda aquella voracidad sexual es sincera? Spelvin lo logró a puro pulso, mira tú.
Luego de deslumbrar a los gringos en “Devil in Miss Jones”, la falta de atributos anatómicos no fue obstáculo para que Georgina Spelvin participe en infinitad de producciones posteriores. Hizo apariciones discretas en el cine mainstream, como un guiño para la audiencia pornófila, pero casi siempre en el rol de prostituta, donde suelen encasillar a las actrices XXX cuando intentan cruzar la frontera. Spelvin hizo su última aparición, pero sin sexo, en el remake “The New Devil in Miss Jones” (2005), nueva revisión de este film ya antes manoseado hasta por cinco falsas secuelas, y se retiró a los 47 años, vaya descaro.

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9 comentarios:
Muy buen análisis! Como siempre, gracias. Te animo a que, alguna vez, comentes sobre Fellini (o, simplemente veas esa maravilla/locura llamada 8 1/2). No sé si vea esta película; a decir verdad me parece que café Flesh es más profesional o por lo menos más interesante; y ya que hablamos de estos temas oscuros, has oído del comiquísimo clásico de Woody Allen "Everything You Always Wanted to Know About Sex (But Were Afraid to Ask)"? Saludos de un colombiano en USA.
FASCINANTE POST, así, con mayúscula. Yo hace tiempo que solo veo porno rodado en 35 mm (excepto alguna de la última etapa de Tracy Lords, actriz que me fascina a más no poder).
Y Damiano es un ser que me resulta entrañable, su manera de ver el porno...me encanta!!
Saludos!!!
Es un post fantástico. Lo ciertoe s que me voy a tner que poner un día de estos a ver si alguna de esas estrellas que me vuelve loco protagonizó porno
Por cierto, me he dado cuenta que te tengo sin enlazar. Eso se soluciona ahora mismo
Hola. Me parecio interesante realmente que comentes sobre el cine de Gerard Damiano, solo he visto Deep Throat, pero tengo entendido que sus trabajos posteriores son superiores y sigo con la curiosidad de saber como son los documentales sobre pornografia que grabo a fines de los 60s. Tendras ese documental que se llama algo asi como All about sex?
Saludos
Me gusta leer tus comentarios sobre cine porno, porque de alguna manera le queitas de encima esa onda de cine calentón y clandestino que ha tomado hoy, incluso con las producciones clásicas... Hoy en día te nombran porno y se te vienen a la mente los fuidos diálogos que puedes encontrar en estas cintas... "HOOO, SI, SI... DALE, DALE, SIS, SIS, HOOOO"... Para que veas, así estás las cosas en el siglo XX.
Sabes, al señalar que el paso de virgen a ninfómana de la protagonista es bastante convincente, me hiciste recordar a una película del '99 llamada MENTIRAS, de Sun-Woo Jang... ahi pasa algo parecido, claro que sin virgenes suicidad, ni visitas al infierno... Sólo el paso de una virgen hacia el mundo sadomasoquista en compañía de su amante... Todo contado con el tradicional dramatismo que tienen los asiáticos para contar estas pseudo historias de amor... Como el Imperio de los sentidos, película que me pareció horriblemente latera (aburrida), para toda la expectativa que me habían pintado respecto a ella...
En fin Andres... que estés muy bien... espero que todo en tu vida vaya bien y que tus posts sigan siendo tan excelentes como siempre...
Saludos
ALMA
Vi la película anoche, descubriendo las infinitas posibilidades de esa maravilla llamada Utorrent. Concuerdo con tu post -que no leí pues hasta este momento no tuve la ocasión de verla- cuando señalas la memorable actuación de la protagonista.
Tal vez podrías recomendar otras clásicas del XXX. Mi predilección, creo que desde que empecé a disfrutar esta industria, fue siempre por los clásicos: tienen esa cuota de argumento que ahora se extraña.
Saludos.
La tengo bajando en el e-mule y estoy deseando que pasen los 48 mintos queme indica que faltan para completar la descarga. Cuando la pueda ver, ya te comentaré mis impresiones
Pues ya la he visto. Sólo puedom alabar el valor de Damiano, al elegir una actriz más bien feucha (contrastando con la línea actual de la industria) y contarnos una historia más bien terrible, en la lìnea de mi asorado Sade, y que hace pensar. Eran otros tiempos, más ingenuos quizás. Ahora es imposible ver una historia, ni buena ni mala, y el género ha devenido en un continuo y aburrido mete-saca
Es una película de deseperanza. A diferencia del común XXX que te deja un sabor a hartazgo esta película te deja un sabor raro, fastidioso, deprimente.
Definitivamente una de las mejores de su género.
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